El reciente conflicto laboral en AkzoNobel, y en particular la readmisión de la compañera Sonia, se ha convertido en un símbolo de la resistencia obrera y de la importancia de la acción sindical ante las políticas de precarización y represión. Nuestro sindicato, co.bas, jugó un papel crucial en este pulso contra la multinacional.
El origen del conflicto: despidos y persecución sindical.
El conflicto estalló cuando AkzoNobel, una empresa líder en el sector de las pinturas y recubrimientos (propietaria de marcas como Titanlux o Bruguer), anunció una reestructuración a nivel mundial que contemplaba miles de despidos. En España, esta medida se materializó con el despido de cuatro trabajadoras de la planta de Zona Franca en Barcelona, entre ellas, Sonia Quesada, delegada sindical de nuestro sindicato y miembro del comité de empresa.
Desde co.bas, denunciamos de inmediato que estos despidos no eran solo parte de un plan de externalización, sino un claro ejemplo de persecución sindical. Con ellos, la dirección de AkzoNobel buscaba debilitar la organización de los trabajadores y sembrar el miedo ante futuras reestructuraciones. El despido de una delegada de co.bas, elegida pocos meses antes en las elecciones sindicales, fue interpretado como un claro mensaje intimidatorio para el resto de la plantilla. Queremos recordar que previamente nuestros representantes sindicales se habían querellado contra la empresa por una vulneración de derechos sindicales, por no dejar asistir a reuniones a nuestra delegada LOLS, Montse Abolafia; un proceso por el que fueron condenados la Empresa y UGT. La compañía respondió abriendo un expediente disciplinario contra David Pérez, también delegado de co.bas en el mismo centro, expediente que pudimos retirar gracias a la batalla sindical.
La respuesta obrera: unidad, huelga y movilizaciones.
Ante esta agresión, la respuesta de los trabajadores de AkzoNobel en la planta del Prat fue contundente y ejemplar. Bajo la coordinación de co.bas, se inició una lucha decidida por la readmisión de las compañeras despedidas, especialmente la de Sonia. La plantilla demostró una gran unidad y solidaridad, organizando asambleas, espacios clave para la toma de decisiones y la cohesión de la plantilla.
Se convocaron varias jornadas de paro total que paralizaron la actividad de la empresa y visibilizaron el conflicto. Estas huelgas, que fueron un elemento de presión fundamental, fueron seguidas de movilizaciones y concentraciones como demostraciones públicas de fuerza y rechazo a las políticas de la empresa, generando así visibilidad y apoyo externo.
Todas estas medidas dieron como fruto el inicio de intensas negociaciones con la intermediación del Departament de Treball de la Generalitat, donde se mantuvieron largas y tensas reuniones con la dirección de la empresa.

La victoria: Sonia, readmitida
Después de varias semanas de conflicto, con dos jornadas de huelga y una intensa negociación de más trece horas en mediación, AkzoNobel accedió a readmitir a la delegada Sindical Sonia Quesada.
Esta readmisión representó una victoria sindical significativa. Además de su reincorporación, Sonia mantendrá un crédito sindical de 20 horas mensuales. Para las demás compañeras despedidas, que aceptaron la indemnización ofrecida por la empresa, se consiguió que, en caso de que se convoquen puestos de trabajo en la planta de Zona Franca, tengan preferencia. Asimismo, para la planta del Prat, se obtuvo el compromiso de sentarse a hablar con el comité en caso de despidos colectivos, dando prioridad a propuestas acordadas, como prejubilaciones, salidas pactadas y movilidad funcional entre centros.
Esta victoria es una demostración palpable de que la lucha organizada puede doblegar el brazo de las grandes empresas. Demuestra que la defensa y la lucha son el único camino para frenar los ataques empresariales y subraya la importancia de contar con sindicatos combativos en las empresas como antídotos para frenar los ataques de los empresarios y mantener derechos y dignidad.
Queremos agradecer y hacer una mención especial a todos aquellos colectivos que nos habéis apoyado en los piquetes, las asambleas y nos habéis dado cobertura en las redes sociales.
¡Gracias a todos y todas por vuestro compromiso con la clase obrera!
David Orta, delegado sindical de co.bas en AkzoNobel